lunes, 18 de abril de 2011




Porque estoy harta, harta de todo, de todos los días lo mismo. Las cosas nuevas no surgen y las ideas son enterradas. La innovación ha muerto, y con ella todos nuestros sueños.
El aire que se respira es espeso, pesado, plomizo, de hierro. Los rayos de sol que nos alcanzan nos muestran un mañana que alcanzamos rozando con la punta de los dedos. Para luego desvanecerse.
Los trinos de los pájaros son sonidos de ayer en nuestros oídos, el maullido lastimero de los gatos, la prueba de nuestra realidad.
Lo que ocurre en el mundo, no es más que algo previsto, y tantas desgracias no son más que hechos forzados a ocurrir por quién no tiene en cuenta que en sus manos posee a la indefensa multitud que agazapada espera el golpe final.
Las mariposas revolotean asustadas alrededor de los silbidos. Las plantas marchitan y se encogen temiendo lo peor, que está a punto de suceder.
El perro va junto a la llorosa niña asustado, y ambos se esconden bajo la mesa, abrazándose, sollozando, con el gris y frío aire entrándole apresurado a los pulmones, en ese sombrío ambiente que dista de ser feliz.
La rota muñeca cae de la oscura estantería, mientras el resto de muñecos observan con sus plásticos ojos como se precipita al vacío, produciendo un sordo eco al caer, de lado.

2 comentarios:

  1. jo, muchas gracias :)
    tu escribes muy bien, la verdad!
    muua

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  2. aaainsss..clauu tiaaa...q escribaa stas cosas yoo seriaa normaal..xq sii..peor tu no!
    asiqee anima stee blog YA! ii pasate x el mio soo zorraa!
    TeeQQuiiero!

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