domingo, 20 de noviembre de 2011

Increíble






- Eres increíble.

- No.

- Si, en serio, lo eres.

- Que te digo yo que no.

- ¿Por qué?

- Porque, ¿cómo voy a ser increíble si no soy capaz de sostenerme a mi misma?


¿Como voy a ser increíble si no soy capaz de sostenerme a mi misma? Si llega un momento en el que no son más que sonrisas falsas y mal hechas. Puntos sin poner sobre las íes. Nubes sin formar en el océano.

Qué hacer sin no son más que malos momentos y pésimas contestaciones. Hechos símiles al hundimiento del Titanic. Miradas perdidas igual a brisas en días de otoño.

Tú me hacías más soportable a los demás.
Contigo intentaba un día tras otro ser mejor persona, superarme a mi misma.
Gracias a ti mi vida se veía diferente.

Vuelve... joder, vuelve. Te necesito.

Me estoy hundiendo, un día tras otro, y tú lo estas observando impasiblemente, sin inmutarte, ¡sin hacer nada para evitarlo!

Te quiero y te odio. Y por encima de todo te necesito.

Hoy he vuelto a casa, y me faltabas tú. Al igual que un loco necesita su medicación, o un drogata su droga. O un alcohólico su alcohol. O un recién nacido su sustento. O una niña pequeña su ilusión. O un persona, al amor de su vida.

Y no sabes cuánto te estoy odiando por lo que estás haciendo. Te podría decir que te arrepentirás. Podría haber intentado boicotearte o hacer que sufras más. Podría haber hecho tantas cosas aunque no te lo creas...

¿Y que por qué no he hecho nada?
Porque sé que lo haces por motivos completamente egoístas, ya que si fuera por tu excusa de que es por mí, ya te habría desmantelado todos tus propósitos.
¿Y por qué digo que son por fines egoístas?
Porque aunque ahora sufras tú, y yo más de lo que crees. Antes también sufrías, mientras que yo era completamente feliz.
Ahora estás en la búsqueda de tú felicidad, sin importarte a quien dejes por el camino. Y por eso mismo, te doy vía libre.

Adiós hasta que quieras que nuestros caminos vuelvan a juntarse. Te quiero.

Y ya no se ni lo que escribo, simplemente me vuelco encima de las teclas...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Algún suspiro que dar?